La eternidad para la mayoría es un sueño distante, pero para nosotros que conocemos la verdad es una realidad palpable que pronto habremos de experimentar.
Ahora he estado pensando sobre la triste condición de esta mayoria y su terrible final despues de la muerte. Muchos de los cuáles están diariamente a mi alrededor, viviendo sin Cristo y no sabiendo lo que les aguarda cuando se tengan que marchar de esta vida.
¿Como vivir tranquilo ante tal situación?
«Compasión» es algo que todos los creyentes deberíamos sufrir por aquellos que perecen y así cobrar animo y valor para comunicarles las buenas nuevas del Salvador.
Pienso, que una vez que uno ha sido impactado con la Verdad no se puede conformar con menos, y ante tan maravillosa manifestación uno es obligado a compartirlo con los demás, ya sea por amor, compasión e incluso por obligación. Es nuestro privilegio y deber. Pero esto solo va a suceder cuando se ha asumido un compromiso con la Verdad y esto es Cristo.
Él es la Verdad que perdona pecados y da vida eterna a los que salva.
Asi que, este mes es una buena oportunidad para replantear mis objetivos en la Sierra y concluyo que siguen siendo los mismos de hace ya 7 años de cuando llegue aquí por primera vez a trabajar en esta misión, y es: «Seguir llevando la Verdad a quienes tanto necesitan escucharla». La Sierra esta llena de oportunidades y aunque, a veces no es fácil trasladarse para llegar a ellos en las diferentes comunidades, reconozco que el Dios de los imposibles está conmigo y que como siempre Él me va ayudar a cumplir su voluntad. Y que un dia no muy lejano el me demandará cuentas. Asi que ahora es cuando debo trabajar.
¡Cuán atrevido y necio seria para mi desperdiciar esta vida en otras cosas que no sean aquellas que luchan por la causa del reino de Dios!.
«No soy de este mundo» —dijo Pablo. «Todo lo tengo por basura». Sú ideal y unica meta factible era Jesucristo y nada más. Incluso era Jesús quien determinaba sus deseos de morir y también de permanecer aquí. Y a veces; me pregunto el ¿porque los cristianos de hoy no podemos vivir así también?
Y tal vez, esto sea porque no conocemos a Jesús como Pablo le conocia y porque no hemos renunciado a este mundo.
¡Que Dios tenga misericordia de mi y que apesar de mis debilidades y torpeza el Señor me haga un instrumento para su gloria!
Ore por mí estimado hermano, y por este trabajo también.
Video del trabajo de este año.
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